miércoles, 4 de agosto de 2010

Cierto que huí de los fastos y los oropeles

y que jamás puse en venta ninguna quimera

siempre evité ser un súbdito de los laureles

porque vivir era un vértigo y no una carrera,

pero quiero que me digas amor,

que no todo fue naufragar

por haber creído que amar

era el verbo más bello,

dímelo, me va la vida en ello.

Quiero que me digas amor, que no todo fue naufragar

por haber creído que amar era el verbo más bello,

dímelo, me va la vida en ello.



Cierto que no prescindí de ningún laberinto

que amenazara con un callejón sin salida

ante otro más de lo mismo, creyendo distinto,

porque vivir era búsqueda y no una guarida

pero quiero que me digas amor,

que no todo fue naufragar

por haber creído que amar

era el verbo más bello,

dímelo, me va la vida en ello.

Quiero que me digas amor, que no todo fue naufragar

por haber creído que amar era el verbo más bello,

dímelo, me va la vida en ello.



Cierto que cuando aprendí que la vida iba en serio

quise quemarla deprisa jugando con fuego

y me abrasé defendiendo mi propio criterio

porque vivir era más que unas reglas en juego

pero quiero que me digas amor,

que no todo fue naufragar

por haber creído que amar

era el verbo más bello,

dímelo, me va la vida en ello.



Pero quiero que me digas amor, [quiero que me digas amor]

que no todo fue naufragar [que no todo fue naufragar por haberte]

por haber creído que amar [por haberte creido a ti]

era el verbo más bello, dímelo, me va la vida en ello. [dimelo]

Quiero que me digas amor, [que me digas amor]

que no todo fue naufragar [que no todo fue naufragar por amor]

por haber creído que amar [por haber creido que amar]

era el verbo más bello, dímelo, me va la vida en ello. [dimelo]

1 comentario:

verelogia dijo...

Wow! no conozco este tema!!